"Unidos para triunfar", la apasionante historia de Ron Clark

Ron Clark

The Ron Clark Story es un film autobiográfico sobre el profesor Ron Clark que la directora de cine Randa Haines se lanzó a grabar allá por el 2006 y que por esos azares relacionados con las traducciones españolas ha llegado a nuestra lengua con el título de Unidos para triunfar.
Con nuestro querido "Chandler" de Friends como protagonista, se nos cuenta la historia de este maravilloso hombre que decidió salir de su zona confort para ayudar a aquellos que, según él, más necesitaban su ayuda: adolescentes problemáticos del neoyorquino barrio de Harlem. Sus experiencias no sólo han quedado plasmadas en esta película de la que te voy a hablar, Clark ha escrito varios libros de éxito indiscutible y, además, recientemente ha abierto una escuela privada sin ánimo de lucro en Atlanta que pretende seguir la línea base de su ideología como maestro: todos los niños tienen capacidades inauditas que necesitan ser descubiertas para poder ser desarrolladas. 

Como ya he adelantado, Ron Clark tenía todo lo que quería en la vida: una familia que lo amaba, un buen trabajo donde le admiraban, y una cómoda vida en un entorno agradable. Aun así, decide romper con todo eso y marcharse a Nueva York. "Cada día les digo a mis estudiantes que luchen por lo que quieren en la vida, que sueñen en grande, que se arriesguen. Es hora de que siga mis propias palabras" Esta es su justificación para adentrarse en una aventura que todavía sigue viva. Sin embargo, su llegada a la "gran manzana" se presenta llena de obstáculos. Encontrar trabajo no es sencillo, pero no pierde la esperanza. Por fin, se hace con una vacante en uno de los institutos más conflictivos de Harlem que, obviamente, tiene a sus alumnos divididos entre aquellos que tienen mejores y peores rendimientos. No se conforma con la clase con la que el director pretendía que se quedara, repleta de niños obedientes y sin problemas de rendimiento. Él decide elegir el aula más conflictiva del centro, pese a las advertencias de todos. Y ahí empieza su gran reto. 

Sus normas básicas en clase serán considerar que todos forman parte de una familia y, por tanto, deberán tratarse como tal; y que el respeto hacia los demás debe prevalecer por encima de cualquier otra actitud. A partir de ahí comenzará a construir un nuevo modelo pedagógico que irá variando según las necesidades lo requieran. Sabe que tiene que motivar a chicos que no tienen ningún tipo de interés por formarse y que, además, están completamente convencidos de que no sirven para nada. Han crecido en ambientes conflictivos que les han inculcado concienzudamente esa idea. La imaginación será su mejor aliada para adapatarse a las necesidades de cada uno de ellos: lo verás planteando retos locos, inventándose canciones para que se aprendan la teoría...todo con tal de encender la chispa de la motivación. Pero nadie se lo pondrá fácil. Tendrá que nadar contracorriente frente a unas mareas que no se lo pondrán nada fácil. El mismo director del centro no duda en mostrar su total pasividad ante ese grupo de estudiantes a los que considera un gamberros sin ningún tipo de potencial. Los padres de los propios chicos también plantan cara a Clark, desconfiando que pueda llegar a hacer algo provechoso con sus hijos. Pareciera como si sólo el supiera ver el talento de los chicos que le acompañan día tras día. 

La película, como habrás podido apreciar, no deja indiferente a nadie. Una lección magistral sobre cómo hacer que los alumnos crean en ellos mismos, potenciando su autoestima. Quizás si tuviera que quedarme con una frase, me quedaría esta, pronunciada por el mismo Ron Clark ante sus alumnos "No estamos trabajando duro durante todo el año sólo para estar listos para un examen. Cada día, en este aula, aprendemos cosas más valiosas que las que se pueden aprender en un libro. Yo os enseño a vosotros y vosotros me enseñáis a mí. Y juntos aprendemos a que nos gusta aprender"