25 de febrero de 2016

#CreateNoHate: los golpes del ciberacoso son reales

Luke Culhane, un joven irlandés de 13 años, es, en apariencia, un niño feliz. Nos han enseñado que eso del bullying es cosa de gente agresiva que proyecta su ira en forma de gritos, escupitajos y golpes. Y Luke no tiene rastros que indiquen que lo ha sufrido. Sin embargo, lleva tiempo aguantando una situación que parece invisible a los ojos de los demás. Harto de ser la víctima silenciosa de lo que conocemos como "ciberacoso", se lanzó a hacer un vídeo donde explicaba cómo cada mensaje que recibía por Facebook, WhatsApp, Twitter, Instagram o Snapchat le golpeaba con la misma fuerza con la que podía haberlo hecho un puñetazo, una patada o una colleja. Se ha hecho tan viral que en pocos días llegó a alcanzar miles de visitas. Su objetivo era animar al resto de los chicos que lo sufren a no estar callados y pedir ayuda a sus padres o profesores, y ojalá lo haya conseguido.

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